De desmayarse.

¿Os habéis desmayado alguna vez? Es una sensación muy extraña. De repente desapareces, y cuando abres los ojos parece que hayan pasado milenios desde la última vez que estuviste ahí. En los pocos segundos de inconsciencia hasta da tiempo a soñar... por supuesto luego no te acuerdas de nada, pero sabes que has soñado algo. Te despiertas sin saber quién eres ni dónde estás, ni qué hace toda esa gente pendiente de ti, ni por qué están sujetando tus piernas hacia arriba... Pues sí, parece que para mí se ha convertido en un ritual cada vez que voy a sacarme sangre, jé. Y lo fuerte es que ni te das cuenta, estás ahí sentada, apretando y aflojando el puño, con esa molesta goma oprimiéndote el brazo y la enfermera toqueteando en busca de una vena que le guste, pendiente de las ocurriencias del enfermero gracioso...
- ¡Señora, los botes! ¿O quiere llevarse la sangre en el bolso?
- ¿Qué te pasa, chiquita? ¿Tienes anemia?
- Qué va, es sólo para una revisión...
Y de pronto, golpecitos en la mejilla y una mano ajena sujetándome la nuca.
- ¿Estás bien? ¿Estás bien? Háblame...
Y tras unos segundos de desconcierto, llega mi madre corriendo con cara de susto.
- ¿Otra vez?
En realidad he pasado miedo. Siempre es una especie de vuelta a la vida. Como si acabara de llegar y estuviera en blanco, y ese "¿estás bien?" fuera lo primero que escucho. Después todo vuelve a la normalidad, suspiro y me da por reírme.
- Sí, sí, sí, estoy bien...
- ¡La próxima vez avísame, niña! Y te tumbo en la camilla.
La próxima vez, pienso yo, que me den un tarrito, yo lo meo en mi casa tranquilamente, y que se apañen con eso... así nos ahorramos todos el mal rato. Aunque el emparanoiamiento que se queda luego tiene su gracia...

Tras varias cabilaciones he llegado a la conclusión de que todo esto puede resumirse en esta grandiosa frase: "En verdad mola, pero en verdad... no" xD

Fin y gracias por su atención. Jéeeeeeeeeeeee!