Do your senses tingle?

When you dance I can really love - Neil Young

- Tú no tienes nada de inocente. Y más quisiera yo que a mi merced...
- Más quisiera yo, que te dieras cuenta de que sí.
Ignoré el comentario, y el insistió.
- Más quisiera yo, que me vieras alguna de las pocas veces que te da por mirarme.

Ella está escondida detrás de un error. Pretende mantenerle al margen de su historia. Cree que lo está consiguiendo sólo porque dibuja allí a lo lejos una puerta de escape, y se siente segura así, pensando que podrá salir corriendo si las cosas se ponen muy feas. No destaca por ser una chica despierta, y tal vez por eso no se da cuenta de que las cosas ya están feísimas. Que se peina como a él le gusta y no se ha quitado aquellos pendientes desde que él le comentó lo bien que le quedaban. Que nunca le interesó el cine, pero en las últimas semanas ha visto todas y cada una de las películas que él le ha recomendado, y entre sus aficiones ahora destaca ir a la Filmoteca los jueves. Que prefiere pasar una tarde de conversación al calor del sol a pasar una noche de sexo a la luz de las velas... y eso, nunca es una buena señal.

No lo es, si tenemos en cuenta quién es ella, y cuál es la historia de la que quiere apartarle.

[...Llega sobre las dos de la mañana. Nunca se queda mucho rato. Sé que llegará si espero lo suficiente, pero el sueño siempre me vence antes.]